Demasiadas personas de las que pusieron en marcha la Asociación de vecinos y vecinas de Oliver ya no están entre nosotras, y las que quedamos rondamos o pasamos de los 70 años, pero estoy segura de que recordamos esos años con el orgullo de haber participado en un proceso rico en generosidad, valentía y creación colectiva.

Como se expone en el  tomo 4 de “Zaragoza Barrio a Barrio” pag. 155, Esta asociación nace a mediados de 1970 agrupa a unos cuantos vecinos (sobre todo jóvenes). Planteada la necesidad de una asociación legal que permita reunir a los vecinos y vecinas (sin los problemas de la clandestinidad de la época) e intentar solucionar los problemas del barrio.

El camino de legalización de la asociación se vivió con inquietud y cierto miedo por parte de las personas que realizábamos los trámites necesarios de forma presencial. Muchos de los jóvenes de Oliver de aquellos años formamos nuestro pensamiento a través de diversos ciclos de historia, economía, la guerra civil, los barrios…)

Por entonces estaban surgiendo algunas otras asociaciones en Zaragoza y otras grandes ciudades del estado español. Con la asesoría del Picarral se decidió por fin dar el paso a la asociación formando una junta promotora de la Asociación de Cabezas de Familia.

Finalmente a finales de 1970 salían aprobados los estatutos y en 1971quedamos totalmente cogidos en el reglamento de las asociaciones del Movimiento.

Con esta nueva situación en cuanto a la legalidad se comenzó a abordar la solución a cada uno de los problemas del barrio:

Basuras: entonces se recogían en un camión en malas condiciones higiénicas por medio de una contrata particular. Se consiguió, mediante la recogida de firmas la incorporación del barrio al servicio de recogida de basuras municipal. Se hizo además una campaña por todo el barrio para evitarel arrojar basuras en solares y en los taludes del ferrocarril

Vigilancia nocturna: en aquellos años no existía y el barrio lo consiguió. Tubo un mérito grande por la cantidad y la calidad de las muchas reuniones celebradas con mucha presencia de vecinos y vecinas. Durante un tiempo los propios vecinos tuvimos que hacernos cargo del cobro de los recibos

Se consiguieron buzones de correos, mejoras en el alumbrado público etc

En otro orden de cosas se comenzó a editar una revista del barrio totalmente realizada por la asociación. Este recurso de comunicación se vendía puerta a puerta. Se llegó a hacer una tirad de 700 ejemplares.Se hicieron homenajes a jubilados y colonias infantiles.

A lo largo del recorrido de esta entidad se ha pasado por diferentes etapas en la que se ha ido asumiendo la realidad del momento tanto en cuanto a las reivindicaciones cómo en las tendencias sociales de la sociedad en la que vivimos. 

La generosidad de las personas que se han implicado en las tareas cotidianas y la participación activa en las luchas planteadas es la fuerza que ha hecho posible que se hayan logrado muchos de los recursos de los que ahora disfrutamos.

Acta fundacional AVV Oliver